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La fiebre amarilla es un virus mortal que sigue siendo un problema en diferentes partes de África Occidental y Sudamérica. Los programas de vacunación han sido vitales en la contención de los brotes de fiebre amarilla y son especialmente importantes para los viajeros extranjeros no inmunizados que viajen a zonas afectadas. En este artículo, analizaremos de cerca la fiebre amarilla y los requisitos para la vacunación.
¿Qué es la fiebre amarilla?
La fiebre amarilla es una enfermedad vírica portada por un mosquito conocido como Aedes aegypti que podemos encontrar en países tropicales y subtropicales. El Flavivirus se transmite a través de la picadura del mosquito portador de la fiebre amarilla. Existen ciertos parámetros que aumentan el riesgo de contraer la fiebre amarilla:
- Zona a la que viajas;
- Época del año;
- Actividades que realizas durante el viaje;
- Inmunización;
- Índice de contagio;
- Tiempo de exposición.
En marzo de 2022, hace muy poco tiempo, se declaró el último brote de fiebre amarilla en el condado de Isiolo (Kenia). La Organización Mundial de la Salud registró 53 casos sospechosos de fiebre amarilla y 6 fallecimientos.
Síntomas y tratamiento de la fiebre amarilla
La fiebre amarilla se divide en dos fases: la fase aguda y la fase tóxica. Durante la fase inicial, la persona afectada puede presentar síntomas como fiebre alta, dolor de cabeza, dolores musculares, vómitos y mareos. En la segunda fase, o fase tóxica, de la fiebre amarilla, los pacientes desarrollan síntomas reveladores como ictericia o coloración amarilla de la piel, latido irregular, convulsiones, sangrado de encías, ojos o nariz y, en ocasiones, incluso hipersomnia asociada al ciclo menstrual. La dificultad que presenta la fase inicial de la fiebre amarilla es que se presenta como otras muchas enfermedades víricas comunes y, en ocasiones, los pacientes no le dan gran importancia. Las personas que noten síntomas durante su viaje a países en los que la fiebre amarilla esté presente deben buscar tratamiento lo antes posible.
Se realizará un análisis de sangre para diagnosticar la fiebre amarilla. No existe tratamiento antiviral eficaz contra la fiebre amarilla. Tampoco existe cura y los tratamientos actuales para la fiebre amarilla están diseñados para ayudar al sistema inmunitario a luchar contra la enfermedad y aliviar los síntomas. Para aliviar los síntomas de la fiebre amarilla, los tratamientos buscan reducir la fiebre, la deshidratación y los dolores musculares.
La Organización Mundial de la Salud informa de que cada año se infectan de fiebre amarilla unas 200 000 personas y que las personas que no han recibido la vacuna corren el mayor riesgo. Hay 13 países sudamericanos y 34 países africanos en los que la fiebre amarilla es una enfermedad endémica.
¿En qué consiste la vacuna contra la fiebre amarilla?
La vacuna contra la fiebre amarilla está compuesta de una cepa atenuada del virus que no constituye un peligro vital y que proporciona al paciente inmunidad contra la cepa mortal. El científico sudafricano, Max Theiler, desarrolló la vacuna en los años 30 y obtuvo el Premio Nobel más adelante por su decisivo trabajo.
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Certificado de vacunación contra la fiebre amarilla
Ciertos países solicitan el Certificado Internacional de Vacunación o Revacunación contra la Fiebre Amarilla como requisito de entrada al país. Algunos de los países que solicitan estar vacunado contra la fiebre amarilla son los siguiente:
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Puedes vacunarte contra la fiebre amarilla y obtener el certificado de vacunación en los centros oficiales de vacunación. El centro de vacunación u hospital que te administre la vacuna contra la fiebre amarilla también te proporcionará el certificado de vacunación contra la fiebre amarilla, válido de por vida.
Evidentemente, el coste de la vacuna contra la fiebre amarilla varía de un país a otro. El tiempo es esencial a la hora de reservar tu cita de vacunación contra la fiebre amarilla: debes vacunarte al menos 10 días antes de viajar. Ten en cuenta que, incluso tras haber recibido la vacuna, es importante que tomes las medidas necesarias para evitar las picaduras de insectos durante el viaje.
¿Quién debería abstenerse de recibir la vacuna contra la fiebre amarilla?
Hay algunas personas que NO deberían vacunarse contra la fiebre amarilla, es el caso de los siguientes grupos:
- Personas inmunodeprimidas;
- Personas que padezcan leucemia o linfoma;
- Cualquier persona que reciba tratamiento con inmunosupresores, esteroides o quimioterapia;
- Personas cuya función inmunológica sea anormal;
- Personas que hayan recibido un trasplante;
- Bebés de 6 meses o menos;
- Personas con síntomas del VIH;
- Personas alérgicas a los componentes de la vacuna.
Supongamos que formas parte de alguna de estas categorías y que necesites viajar a un país que requiere la vacunación contra la fiebre amarilla y un certificado. En este tipo de casos, puedes contactar con tu centro de vacunación más cercano para pedir consejo y, en ocasiones excepcionales, puede que te redacten una declaración de exención.
Los efectos secundarios de la vacuna contra la fiebre amarilla incluyen dolor muscular, fiebre, dolor de cabeza y dolor en la zona en la que se administró el pinchazo.
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